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martes, 3 de diciembre de 2013

El aislamiento

El sol pegaba fuertemente sobre la piel del caminante, este, con una deshidratacion aparente producto de su noche de juerga anterior, solo esperaba que caminando con la inercia con la que venia pudiera llegar a su morada. Por que...bueno ya estaba pasadisimo de tragos, el nivel de alcohol en su sangre ya habia bajado, aunque no lo suficiente. Esta reduccion solo traia como consecuencia que los remordimientos de una noche pasada, las que traen sus cagadas, se fueron haciendo cada vez mas claros. Despues de aproximdamente media hora de caminata frente a una calle transitada en un dia de verano, los transeuntes pasaban inadvertidos, como si la escena de la que estuvieron haciendo parte, fuera una mas dentro de la cotidianidad de la ciudad. Es decir, un borracho mas en la calle...nada mas que eso. Al llegar a casa, el agua en la cara y el jugo de naranja, no son suficientes para que la coherencia y la cordura vuelvan, todo es mas dificil de lo que parece, el cuerpo ya no se recupera tan facil como hace unos años, los efectos son cada vez mas drasticos y el cuerpo empieza a cobrar factura. La soledad en este punto se vuelve mas certera, no solo porque los malestares del cuerpo son unicos, si no tambien porque la sensibilidad con la que actua el cerebro que ha sido sometido a semejante cantidad de alcohol, hacen que veas miradas inquisitivas en todo el mundo, lo que lleva al individuo a aislarse y a pensar que es un producto enfermo de la sociedad. Pero esa conciencia de la que hace gala este sujeto, lo hace una persona que si bien no esta sana mentalmente, tampoco la hace la mas culpable y digna de un hospital psiquitrico, aun tiene conciencia, aun queda en su interior una voz que dicta que esas noches de juerga no pueden ser de esta manera. En sintesis, este es el estado mas doloroso, es en el que la conciencia castiga de la manera mas brutal. No puedo menos que compadecer a aquel borracho empedernido, el mismo que hace gala de conocer a reconocidos intelectuales, de haber tenido una formacion academica y de haber disfrutado de trabajos que otros consideran dignos de admiracion. Lo cierto es que a la hora de ponerlo todo en la balanza, por mas que otros recuerden esto como algo positivo, las cagadas que se mando mandan para abajo lo que pudo llegar a hacer de bueno. Los demas ven como se aisla el sujeto, los demas no saben cuanto tiempo le llevo hacer la caminata de casi 30 cuadras, los demas apuntan su dedo inquisidor para definirlo como un borracho perdido. Tal vez tengan razon, tal vez si sea un tipo verdaderammente debil que no es capaz de dominar sus instintos, no claro, no esta preparado, dijo que iba a ser una noche tranquila y se dio cuenta que una vez que le ponen alcohol en la mesa no se puede controlar por completo, no, definitivamente se dio cuenta que muchas de las cosas que un primer momento lo enorgullecian hoy le da verguenza. Sin embargo, despues de estar un par de horas dormido, y de hidratarse, se dio cuenta que la vida puede dar segundas oportunidades, y que la decision esta enteramente en sus manos, que la batalla mas dificil es esta, la de seguir actuando en contra de lo que su conciencia le diga, es decir, haciendo de su vida la contradiccion mas grande. Entre preguntas aun siguen apareciendo respuestas a miles y miles de circunstancias que pudieron darse y no se dieron de manera final, tienes suerte (le dice su voz interior) todo pudo terminar peor, todo estaba planeado para que fuera otro riesgo mas. lo que no te mata te hace mas fuerte? no se, dejemolo hasta este punto.

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